El hospital privado Povisa de Vigo a la sanidad pública gallega {flike}
Fuente : https://www.nuevatribuna.es/articulo/sanidad/chantaje-hospital-privado-povisa-vigo-sanidad-publica-gallega/20181016104926156580.html
Autor: Manuel Martín García
En 2016, tan solo dos años después esta renovación declaró 7,1 millones de euros en pérdidas y presentó una reclamación administrativa ante el Sergas para que le pagase 9,8 millones de euros por fármacos.
LA EMPRESA AMENAZA CON CERRAR EL CENTRO
Este anuncio forma parte de una vieja estrategia de Povisa de amenazar con el cerrar el centro creando una situación de alarma entre los trabajadores y la población que atiende. Esta estrategia, de claro corte chantajista, ha sido desarrollada por este hospital privado casi desde el mismo instante que consiguió un Concierto que le permitió librarse de una quiebra originada por su mala gestión y por actividades especulativas.
Mediante estas presiones consiguió, desde la firma del primar Concierto, condicionar la planificación de los servicios sanitarios del área de Vigo. Gracias a sus presiones y capacidad de influencia consiguió que la Conselleria de Sanidade de Núñez Feijoo recortara 400 de las 1.470 camas previstas para el nuevo Hospital Alvaro Cunqueiro, camas que estaban destinadas a acabar con el Concierto integrándolas en el nuevo hospital. Este recorte en el proyecto le permitió mantener el Concierto y mantener una posición dominante en las negociaciones con la Xunta, ya que esta no podría poner operativas las 400 necesarias para atender a una población de más de 139.000 personas.
Por otro lado, las amenazas de cierre suponen una presión a sus trabajadores para que acepten recortes en sus condiciones laborales: En 2010, tras declarar ganancias en los años anteriores, una auditoria de Deloitte informo de pérdidas por 1,9 millones de euros lo que fue aprovechado por Povisa para amenazar con despedir a 787 trabajadores con un ERE. Posteriormente en el 2014 (a los tres días del nuevo y beneficioso Concierto Singular) plateó otro nuevo ERE para despedir a otros 56. Estas amenazas de despidos y cierres a las plantillas están dirigidas a que presionen a la Xunta en apoyo de una nueva negociación que mejore el Concierto.
El Concierto Singular al servicio de los intereses privados
En 1966 se formo un ventajoso Concierto permitió a Povisa cobrar por adelantado e incrementar sus ingresos cobrando más por sus servicios, por aumento de la población asignada (de 102.312 a 127.405, habitantes), y por contratar muevas actividades. Paralelamente a estas medidas, el SERGAS suprimió los controles sobre los excesos que se sancionaban económicamente.
En 2006 anunció unos recursos ante los tribunales si el Sergas no pagaba la deuda acumulada entre el año 2.000 y el 2.004 por exceso de cupo y se ofreció a resolver las listas de espera en 14 meses si se les daba más dinero (pese a tener las listas más altas de toda Galicia, duplicando en ocasiones la de Vigo que es la más elevada del Sergas).
En la última negociación del Concierto del año 2014, consiguió modificar el sistema de pago pasando a cobrar por habitante 540 euros por persona/año, solo 100 euros menos que el Hospital Público Alvaro Cunqueiro pese a no atender a pacientes desplazados, a carecer de numerosos servicios como ginecología, paliativos o hospitalización a domicilio y a atender procesos de menor complejidad y coste ya que no realiza cirugía cardiaca, cirugía torácica psiquiatría, tuberculosis y otras patologías respiratorias, etc... Otra importante ayuda a su negocio fue que el nuevo Concierto le permitió ampliar su volumen de negocio captando población en todo Vigo (antes solo prestaba servicios al Morrazo, Coia y Valmiñor). Pese a todo, la mala gestión le condujo a perder 7,1 millones en los dos primeros años y a presentar una demanda por 9,8 millones para medicamentos.
Entre el año 2000 y el 2018 el incremento del concierto alcanzo el 27,1%, tres veces más que el crecimiento de la población asignada que fue de tan solo el 9,6% (de 126.922 a 139.828 personas).
Los problemas vienen de lejos, y aunque la falta de transparencia es la norma en el Concierto el Informe de Fiscalización del Concierto de Povisa realizado por el Consello de Contas de Galicia en 2006, mostró que el proceso se realizó vulnerando la legislación y sin ninguna transparencia, que las revisiones anuales eran utilizadas para incrementar sustancialmente las ganancias, que los costes se incrementaban utilizando ciertas trampas, que existían irregularidades en la facturación de consultas, que los servicios se facturaban a un mayor precio de loa acordado o que Povisa consiguió eliminar la inspección médica.