MANIFIESTO: INFORME SOBRE LOS RECORTES SANITARIOS EN LAS COMUNIDADES AUTÓNOMAS. {flike}
La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública ante las declaraciones realizadas por la Ministra de Sanidad en su comparecencia parlamentaria tiene que señalar:
1) Muchas de las propuestas realizadas por la Ministra son generalidades, a veces sobre materias sobre las que el Ministerio no tiene competencias, que ya se habían realizado por los anteriores ministros en los últimos 20 años sin que se haya producido avance significativo al respecto, como el calendario vacunal único (por supuesto que necesario), el Pacto por la Sanidad o la tarjeta sanitaria única para todo el Sistema Nacional de Salud o la central de compras (cuestiones muchas veces prometidas pero nunca conseguidas). Lo que no se especifico en la comparecencia es que vías van a utilizarse, aparte de los buenos deseos, para conseguirlos.
2) La libertad de elección de medico ,enfermero, pediatra y centro, el titular estrella de la intervención, es claramente una “cortina de humo” para oscurecer con el debate los temas fundamentales de los que nada se dijo: la financiación de la sanidad, la contradicción entre las políticas de recortes y el derecho a una atención sanitaria de calidad, la política privatizadora y sus efectos en el encarecimiento de la Sanidad Pública, y la reforma del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) para hacerlo eficaz.
3) La organización de la libre elección es un tema competencia de las CCAA, pero planteado en términos generales es pura demagogia, como diría el Presidente del Gobierno, es “de sentido común” que 47 millones de españoles no pueden elegir el mismo médico, el mismo enfermero, el mismo pediatra y el mismo centro sanitario porque de suceder así sería imposible que les atendieran, y por lo tanto hay que establecer restricciones y/o regulaciones a la misma, y a la postre una ampliación de la libertad de elección sobre la que ya existe (desde la Ley General de Sanidad de 1986) solo favorece la desintegración del sistema sanitario público y la perdida de su capacidad de planificación y organización que es lo que le permite asegurar una atención sanitaria de calidad en todo el territorio del país. Además abre la puerta a la utilización progresiva del sector privado y a la privatización de la sanidad.
4) Tampoco se entiende bien que significa esa Ley de Servicios Básicos que se pretende aprobar para supuestamente “garantizar los servicios esenciales” y la “equidad en el acceso”, cuando existe un RD que establece la cartera de servicios comunes del SNS y el procedimiento para su actualización (RD 1030/2006) que cumple estas funciones, salvo que lo que se pretenda es realizar un recorte de las prestaciones ya reconocidas.
5) En cuanto al tema de la prestación farmacéutica es evidente que se deben realizar mejoras sustanciales, pero tampoco se necesitan mas concreciones.
6) Por fin el tema del aborto señala el lastre ideológico del fundamentalismo católico que tiene el Gobierno. La actuación se debe de dirigir activamente a prevenir los embarazos indeseados mediante políticas activas de prevención e información sobre el uso de anticonceptivos, y una vez que se producen estos a facilitar la libre voluntad de las mujeres y el el caso que deseen abortar a facilitar el acceso de la prestación en el sistema público. Lo demás solo supone empeorar la situación y aumentar la morbilidad y la mortalidad.
Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública
2 de Febrero de 2012